Estimación de voto realizada por GAD 3 para varios medios de comunicación. Pablo Casado obtendría, si se celebrasen ahora las elecciones generales, una resonante victoria que le llevaría directo a la Moncloa porque no existe una opción alternativa. El PP sumaría 138 escaños en el Congreso y dejaría muy atrás al PSOE, con 103. VOX, aunque retrocede, se consolidaría como tercera fuerza con 40. La suma de los populares y la extrema derecha otorgaría a Casado una cómoda mayoría absoluta con 178 diputados. Y el Partido Regionalista de Cantabria mantiene el escaño que actualmente ostenta José María Mazón.
Pocos días antes de dejar de ser vicepresidente segundo, Pablo Iglesias insistió en el mensaje que había arrojado al PP a lo largo de la legislatura: «La derecha del berrinche y de la cacerolada no gobernará en España porque nunca sumará mayoría en el Congreso para hacerlo». Pues no. Al menos no será así con los datos de la encuesta de GAD3 para este periódico. La ola generada en Madrid por Isabel Díaz Ayuso, el crecimiento del ‘antisanchismo’, el recelo hacia los socios de Pedro Sánchez, la fatiga por la pandemia, la crisis económica han formado un caldo de cultivo en el que germinan las expectativas de victoria que la encuesta atribuye al PP.
Casado podría gobernar en solitario con el apoyo externo de Vox o incorporar a los de Santiago Abascal al Consejo de Ministros. Una correlación de fuerzas inversa a la actual. El bloque de la derecha tendría 178 diputados, sin contar con Ciudadanos y Navarra Suma, y si se añaden llega a los 182. El de la izquierda, PSOE, Unidas Podemos y Más País, 126, que con las fuerzas nacionalistas e independentistas podría alcanzar los 166. Un vuelco en toda regla que vendría a confirmar la tesis del líder de los populares de que «estamos ante un cambio de ciclo».
Estos números discuten el análisis del PSOE de que los resultados obtenidos por el PP con Ayuso en Madrid no eran extrapolables al resto de España por la sociología electoral conservadora de esta comunidad y por el contexto en que se celebraron esas elecciones autonómicas (una potente candidata popular, un flojo cabeza de cartel socialista con una campaña errática). Pero algunos en el PSOE, y también expertos independientes, ya alertaron de que en Madrid había aflorado una fuerte corriente antisanchista y un voto de castigo al Gobierno de Sánchez que no eran solo patrimonio local.
Estos resultados también constatan que hay una recuperación del bipartidismo. PSOE y PP tienen en estos momentos 209 diputados, el 59,7% del Congreso, y subirían a 241, el 68,8%, sin que ninguno de los nuevos partidos pueda aspirar a sentarse en su mesa.
32 meses de legislatura
El PSOE, según GAD3, perdería 17 de sus 120 diputados con el 25,4% de los votos, casi tres puntos menos que en las generales de hace dos años. Un resultado algo peor del que obtuvo Alfredo Pérez Rubalcaba en 2011 con 110 escaños. Aquel revés abrió la puerta a una de las crisis más serias del partido y desembocó en la llegada de Sánchez a la secretaría general.
Unidas Podemos no rentabilizaría su paso por el Gobierno de coalición. Más País duplicaría su presencia en el Congreso con seis diputados y mejoraría en dos puntos su apoyo en las urnas. Ciudadanos ni siquiera llegaría a tanto y quedaría condenado al grupo mixto con los dos escaños y el 3,3% de las papeletas que le atribuye el sondeo. Lejísimos de los 57 obtenidos en abril de 2019.
Fuente: heraldo.es