La Guardia Civil, tras una actuación contra el marisqueo furtivo, ha procedido a la intervención de más de 10 kilos de percebes que habían sido recogidos de manera ilegal en los acantilados de las caras norte y sur de Cabo Mayor.
El pasado día 5 de mayo, el Servicio Marítimo Provincial de la Guardia Civil, organizó un dispositivo contra el marisqueo ilegal en la zona de Santander, desde el mar y tierra.
La patrulla que prestaba servicio desde una embarcación semirrigida, localizó, a primeras horas de la mañana, a dos grupos de cuatro y tres personas cada uno, realizando marisqueo de percebes en los acantilados de Cabo Mayor.
En el momento en el que los componentes de la tripulación saltaron a las rocas, con el fin de identificar a dichos individuos, algunos de ellos trataron de huir abandonando herramientas y capturas. Éstos últimos fueron interceptados minutos después por los efectivos en tierra.
Identificados a todos ellos, se comprobó que uno de los siete individuos, se encontraba inhabilitado para la práctica de marisqueo por un juzgado de Asturias.
Por este motivo, los agentes procedieron a instruir diligencias en calidad de investigado a este hombre de 39 años de edad y vecino de Santander, como presunto autor de un delito de Quebrantamiento de Condena.
Las otras seis personas fueron denunciadas por mariscar careciendo de la licencia correspondiente.
Finalmente, los agentes procedieron a la intervención de los percebes que arrojaron un peso superior a los 10 kilos. Los hechos serán puestos en conocimiento de la Consejería de Medio Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente del Gobierno de Cantabria.
El marisco incautado fue entregado a una organización benéfica de Santander.