17/05/2024

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El Brittany Ferries Salamanca, más limpio hoy y más ecológico mañana

El 29 de marzo llegará a Bilbao en línea regular el primer buque de pasajeros de Brittany Ferries propulsado por gas natural licuado (GNL). El GNL es sin duda, el mejor combustible del que disponen hoy las compañías marítimas. Eso convierte al Salamanca en un barco más ecológico hoy, pero también lo seguirá siendo en los próximos años, ya que a medida que surjan avances en la tecnología y el suministro de combustibles, el Salamanca estará preparado para ello.

El uso de un combustible más limpio no es lo único que hace del Salamanca un barco más eficiente. El diseño del casco y la proa de los buques de la clase E-Flexer, como el Salamanca o el Galicia (el buque anterior) permiten una excelente navegabilidad en cualquier condición climática. Esto junto con el potente análisis de datos en tiempo real a bordo del buque y el desarrollo del aprendizaje automático permiten optimizar la eficiencia energética en todo momento durante sus travesías.

Inversión en una flota más limpia

La renovación de la flota es uno de los pilares fundamentales de la recuperación de Brittany Ferries tras la crisis del Covid. El Salamanca es el primero de los cuatro nuevos buques propulsados por GNL que están por llegar a la compañía. El siguiente, será el Santoña y que se unirá a la flota en 2023. Ambos buques prestarán servicio en las rutas de España – Inglaterra. El Salamanca realizando la ruta desde Bilbao, y el Santoña desde Santander.

Tras el Salamanca y el Santoña, Brittany Ferries va más lejos, invirtiendo en dos buques híbridos de GNL que llegarán en 2024 y 2025. Estos barcos sustituirán a dos de los buques más antiguos de la flota de Brittany Ferries, el Bretagne y el Normandie, cubriendo las rutas entre Reino Unido y Francia y funcionarán según el mismo principio que un coche híbrido. En el mar se abastecerá de GNL. Pero también funcionará parcial o totalmente, durante las maniobras de atraque y salida, con baterías que se podrán recargar durante el atraque, así como alimentar sistemas como el aire acondicionado, la calefacción y la iluminación a bordo.

«Brittany Ferries se enorgullece de tomar la delantera invirtiendo en las tecnologías del futuro», dijo Christophe Mathieu, CEO de Brittany Ferries. «Tenemos la responsabilidad de llevar al mercado embarcaciones más limpias y eso es lo que estamos haciendo. Pero no sólo las compañías navieras como la nuestra tienen un papel que desempeñar en nuestro viaje hacia un futuro más sostenible. Es esencial un enfoque integrado que incluya a las empresas de combustible, a los socios portuarios y a los gobiernos para apoyar la inversión necesaria en infraestructuras como la energía en tierra. Cuanto más nos unamos, mayores serán los beneficios».

Trabajando en el futuro

Brittany Ferries continúa trabajando junto con Repsol y los puertos de Bilbao y Santander para para tener listas las instalaciones de repostaje de GNL para la llegada del Salamanca y el Santoña. Estas construcciones forman parte de un acuerdo de colaboración formalizado en el 2019. Con una inversión total de 10 millones de euros ambas terminales están siendo cofinanciadas por la Comisión Europea a través del programa CEF- Connecting Europe Facilities. Las instalaciones del puerto de Bilbao, que suministrará GNL al Salamanca, contarán con un tanque criogénico con una capacidad de almacenamiento de 1.000 metros cúbicos, que permite mantener el gas natural en estado líquido.

La energía del GNL y sus ventajas

Como su nombre indica, el gas natural licuado es un líquido creado a partir de gas natural. El gas se enfría a temperaturas de -162 grados Celsius, lo que hace que su volumen se reduzca en un factor de 600, creando un líquido.

Es un proceso de combustión más eficiente que la quema de combustibles fósiles tradicionales, con un 20% menos de emisiones de dióxido de carbono. Los beneficios más importantes provienen de la reducción de los contaminantes de la calidad del aire. Las emisiones de azufre y partículas (hollín) se eliminan prácticamente, mientras que las de dióxido de nitrógeno se reducen en torno al 90%.

El GNL es claramente un combustible para el futuro. Los reguladores y todos los que se preocupan por la protección de nuestro planeta lo prefieren. La Hoja de Ruta de la Energía 2050 de la Comisión Europea, por ejemplo, señala que el gas natural es la clave de las aspiraciones de los objetivos de energía limpia en 2050.

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