«Tenemos la esperanza de que esto sea reversible», ha argumentado Carmelo Renedo, responsable del sector autonómico de la Federación de Servicios a la Ciudadanía de CCOO en Cantabria.
Comisiones Obreras de Cantabria ha anunciado movilizaciones por los cambios previstos en la gestión de los doce centros de interpretación del Gobierno regional, que supondrían «desmembrar» el funcionamiento de los mismos e incluso su «defunción», así como del programa Naturea, ya que se suprimirían las rutas y actividades que ahora se realizan.
Lo ha advertido este viernes la Federación de Servicios a la Ciudadanía del sindicato en una rueda de prensa en la que ha solicitado una reunión urgente con el consejero de Ganadería, Guillermo Blanco, de cuyo departamento depende la Red Cántabra de Desarrollo Rural que gestiona la mayoría de los centros, y que según la formación dan trabajo a 70 personas y reciben una media anual de 130.000 visitantes.
Todos los empleados están llamados a concentrarse, la primera semana de septiembre, ante la sede del Ejecutivo, cita a la que seguirán más convocatorias si no se reconduce la situación generada, que los sindicalistas achacan a Blanco, y que va a hacer «saltar por los aires» y «dilapidar» este proyecto, puesto en marcha hace más de una década y al que se han destinado «millones de euros».
El objetivo es hacer presión para que el Gobierno incluya en los presupuestos del próximo año partidas destinadas al mantenimiento de la actividad de estos centros de interpretación. Desde CCCO denuncian que sobre la mesa del consejero de Desarrollo Rural hay un proyecto que «da al traste» con esta iniciativa e «incumple de manera flagrante» el convenio firmado, poniendo así en peligro el funcionamiento de los centros y los puestos de trabajo, incluidos los operarios que conservan los senderos además del personal administrativo y de gestión.
Lo han advertido el responsable del sector autonómico del sindicato en el Ejecutivo autonómico, Carmelo Renedo; el presidente del comité de empresa de la Red Cántabra de Desarrollo Rural, Óscar Elizondo; y la delegada de personal de la adjudicataria de varios centros, Elena Díaz, que acusan a la administración de estar «propiciando el cierre» de estas instalaciones y el «despido» de sus trabajadores.
Siete de los doce centros de interpretación cántabros dependen de la Red de Desarrollo Rural -los ubicados en La Población, Pesaguero, Oyambre, Saja-Besaya, Santoña, Soba y Valles Pasiegos-, mientras que los otros cinco -localizados en la zona de Campoo-Los Valles- dependen del CIMA, el Centro de Investigaciones del Medio Ambiente, y son gestionados por una empresa externa tras un concurso.
Renedo ha acusado a Blanco de mentir al manifestar que se iba a acometer un proyecto «unitario» con todos ellos, y ha reclamado ver el pliego de condiciones que va a salir a concurso. «Con el nuevo proyecto que se está haciendo se pone en peligro la continuidad de estos espacios«, ha alertado, para señalar que en sus doce años de existencia «han participado muchas empresas y entidades que temen que ahora con el nuevo modelo que se está elaborando, el proyecto salte por los aires».
En este sentido, han considerado que por una «decisión política injustificada» están «desmembrando» el funcionamiento que han tenido estos centros, están «destruyendo» un programa que comenzó hace más de una década y que cuenta con «miles» de visitantes que no sólo acuden a los centros de intepretación, sino que también participan en las diferentes actividades y talleres que se proponen y que suponen un aliciente a añadir para unos espacios que se encuentran, normalmente, en zonas rurales.
«Blanco, quien está continuamente hablando de proyectos para evitar la despoblación en el mundo rural, ha mentido cuando ha hablado de este proyecto como algo unitario, porque hay centros que se quedan fuera del proyecto, hacen una reunificación pero no tienen una visión global y encima se cargan las actividades y las rutas, que es el añadido perfecto para que estos centros reciban turistas y visitantes. Nosotros defendemos su unificación y que sea un modelo único pero no que se acabe destruyendo», ha manifestado el sindicalista.
Por eso, desde CCOO piden conocer el nuevo pliego de condiciones que regulará el proyecto diseñado por la Consejería y lamentan que su titular haya «ignorado» la petición de reunión que le hicieron la semana pasada. Por eso, han solicitado una encuentro urgente para que Blanco conozca el proyecto, paralice el pliego de condiciones y tome medidas «para evitar la desmantelación de estos centros y la destrucción de 70 puestos de trabajo. De lo contrario, supondrá la defunción de estos centros».