El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ha participado hoy en los actos festivos organizados con motivo de la festividad de la Virgen del Mar, patrona de Santander, que este año, como consecuencia de las limitaciones provocadas por la pandemia del coronavirus, ha prescindido, como ya ocurrió el año pasado, de la tradicional procesión y romería. Revilla, quien ha estado acompañado por los consejeros de Presidencia, Paula Fernández; de Educación, Marina Lombó, y de Medio Ambiente, Guillermo Blanco, ha asistido a la misa principal que, con un aforo limitado y estrictos protocolos de prevención, ha sido oficiada por el Obispo de Santander, Manuel Sánchez Monge.
El jefe del Ejecutivo cántabro ha mostrado su satisfacción por acudir de nuevo a esta celebración y poder compartir con los vecinos de Santander la devoción por su patrona en un lugar privilegiado como es el entorno de la Virgen del Mar.
Tras la eucaristía, a la que también han asistido, entre otros, la alcaldesa de Santander, Gema Igual, y el presidente de la Hermandad de la Virgen de la Mar, Jesús Arroyo, la Hermandad ha rendido un homenaje, en la propia ermita, al Ayuntamiento de Santander. Además, la imagen de la Virgen ha sido trasladada desde la parroquia de San Román hasta su ermita en un medio motorizado con limitación de aforo y se ha realizado una ofrenda floral para que los vecinos puedan acudir a lo largo de toda la jornada de forma escalonada.