Así lo ha anunciado hoy el consejero de Industria durante el pleno de la Mesa de Empleo Autónomo de Cantabria, Eduardo Arasti
El Gobierno de Cantabria, a través de la Consejería de Industria, Empleo, Innovación y Comercio, cubrirá a los autónomos sin asalariados a su cargo las cuotas a la Seguridad Social de los dos primeros meses de situación de incapacidad temporal por contingencias comunes, es decir, enfermedad o accidente no laboral, así como a todos los autónomos, tengan o no asalariados a su cargo, en caso de enfermedad grave. De esta manera, se cubrirá el 100 por cien de la cuota ingresada hasta un máximo de 700 euros en total con el fin de aliviar los costes fijos del autónomo durante un periodo de baja con una ayuda que sólo podrá solicitarse una vez al año, por lo que deberá utilizarse cuando más se necesite.
De esta manera, el Ejecutivo autonómico da respuesta a la propuesta sugerida por el presidente de la Federación Nacional de Trabajadores Autónomos (ATA), Lorenzo Amor, con una medida que forma parte del I Plan de Apoyo al Empleo Autónomo de Cantabria puesto en marcha esta legislatura y que en 2026 alcanzará las 100 medidas después de que en 2025 se realizó un esfuerzo presupuestario sin precedentes que alcanzó los 43 millones de euros anuales en ayudas.
Así lo ha anunciado el consejero del ramo, Eduardo Arasti, durante el pleno de la Mesa de Empleo Autónomo de Cantabria, que ha servido para hacer balance de los dos primeros años del Plan y aprobar con los representantes del sector las nuevas medidas a poner en marcha, tales como la mejora de la financiación de los autónomos mediante la fusión de las sociedades de garantía recíproca Sogarca e Iberaval y el Plan de Relevo Generacional, en el marco del I Plan de Apoyo al Empleo Autónomo de Cantabria, puesto en marcha esta legislatura.
«Poner fin» a la continua caída de autónomos de las dos legislaturas anteriores
Durante su intervención, el consejero ha hecho un balance “más que positivo” de un “ambicioso” Plan con el que el Gobierno de Cantabria ha logrado “poner fin” a la continua caída de autónomos de las dos legislaturas anteriores, ocho años, entre 2015 y 2018, en los que se perdieron más de 800 autónomos en la región, es decir, más de 100 autónomos por año durante 8 años. En concreto, entre noviembre de 2015 y noviembre de 2023, se perdieron 895 afiliados al régimen de autónomos, es decir, una pérdida media de 112 al año.
“En todos y cada uno de los meses de noviembre de esas dos legislaturas hubo pérdida interanual de autónomos, excepto en 2021 por efecto de la pandemia”, ha lamentado Arasti, quien ha destacado que, frente a esa situación, en noviembre de este año, 2025, “ha sido distinto”, al sumar 51 afiliados más al régimen de autónomos, sin tener en cuenta la corrección por regularización de falsos autónomos que se están llevando a cabo y que afecta, según la Inspección de Trabajo, a unos 450 falsos autónomos que se han regularizado, pasando al Régimen General de la Seguridad Social.
“Hoy hay más autónomos que hace un año y que hace dos años”, ha remarcado Arasti, quien también ha puesto en valor el incremento de la tasa de actividad emprendedora en Cantabria, con una subida que ha pasado del 5,4 % en 2023 al 6 % en 2024, lo que supone un incremento de 6 décimas frente a las 4 décimas de la media nacional. Unos resultados que, según el consejero, se producen en un contexto de “bajas tasas de paro y las más altas cifras de afiliados a la Seguridad Social de la serie histórica”, y ponen de manifiesto que “las personas que emprenden en Cantabria lo hacen más como una oportunidad que por necesidad, por lo que este avance en la dinámica emprendedora es aún más valiosa y significativa”.
I Plan de Apoyo al Empleo Autónomo de Cantabria
Arasti también se ha referido a la tasa de abandono o cierre en Cantabria, es decir, la población que ha abandonado en los últimos 12 meses la actividad en la región, con una tasa de abandono del 1,5 % por debajo del 2,2 % de la medida nacional. De igual modo, ha puesto en valor la tasa de emprendimiento consolidado de Cantabria, es decir, la población inmersa en actividades emprendedoras de más de 42 meses, que se sitúa en el 7,2 %, por encima de la media española, que es del 6,8 %. “En Cantabria, el porcentaje de emprendedores que fracasan está por debajo de la media nacional”, ha recalcado Arasti.
El consejero ha puesto en valor el I Plan de Apoyo al Empleo Autónomo de Cantabria, al que se ha referido como un documento “vivo y en permanente revisión” que es consecuencia del trabajo conjunto que el Gobierno regional está llevando a cabo con las asociaciones de autónomos de la Comunidad Autónoma. Entre las medidas que contempla, Arasti ha destacado las destinadas a la etapa inicial del emprendimiento y a la etapa de mantenimiento del proyecto, así como las medidas para invertir, innovar y formarse durante toda la vida del autónomo porque, en su opinión, “invertir, innovar y formarse son actuaciones que deben llevarse a cabo de manera permanente en el mundo empresarial”.
Día Europeo del Trabajador Autónomo
La Mesa de Empleo Autónomo de Cantabria ha aprobado la iniciativa del Gobierno de Cantabria de proponer al Parlamento Europeo que declare el día 10 de marzo como el Día Europeo del Trabajador Autónomo en reconocimiento al papel esencial que desempeña este colectivo en la economía, el empleo y la cohesión social. La iniciativa de la Consejería trata de poner en valor el trabajo de los millones de autónomos que desempeñan su labor en la Unión Europea con una fecha, el 10 de marzo, en la que la Unión Europea lanzó uno de los documentos clave de su nueva estrategia económica ‘Estrategia para las Pequeñas y Medianas Empresas (PYMES) para una Europa Sostenible y Digital’ que forma parte de la Estrategia Industrial Europea.
Un documento que, para Arasti, representa “un punto de inflexión en el reconocimiento del papel de las pymes y los autónomos en la competitividad, sostenibilidad y digitalización de la industria europea”, por lo que ha defendido que la petición de Cantabria nace del convencimiento de que los trabajadores autónomos “merecen un espacio propio” en la agenda política europea, teniendo en cuenta, entre otras aportaciones, el esfuerzo fiscal que realiza un colectivo que representa “un pilar fundamental” del sistema de protección social, sosteniendo prestaciones como pensiones, asistencia sanitaria y seguros de desempleo.
Por todo ello, ha confiado en que la declaración oficial del Día Europeo del Trabajador Autónomo sirva para reforzar el reconocimiento social y económico de los trabajadores autónomos; promover políticas europeas específicas de apoyo, protección y desarrollo para el colectivo; fomentar la cooperación entre estados miembros en materia de emprendimiento individual y micro empresas, y estimular la participación de los autónomos en los procesos de digitalización, sostenibilidad y competitividad europea.