«A estas alturas no necesito explicar quién soy, pero sí quiero precisar algunas cosas que son importantes»
Quedaba un minuto para las diez de la mañana cuando Leire Díez, la exmilitante socialista que supuestamente buscaba pruebas para desacreditar a la UCO, comenzaba a dar las primeras explicaciones rodeada de gran expectación.
«Ni fontanera ni cobarde», ha defendido ante cerca de un centenar de medios de comunicación, a los que ha asegurado que ella era «periodista» y «socialista». Según ha dicho, su trabajo descubierto a través de los audios publicados en las últimas semanas iba destinado a escribir un libro de «investigación» sobre la trama de hidrocarburos, entre otros temas.
Durante cerca de 30 minutos, Díez había esperado sentada, posando calmada y sonriente para los medios gráficos prácticamente en silencio. Un silencio que solo se rompía por el bullicio y peticiones de los medios. Hasta que la exmilitante lo ha roto justo antes de que diesen las diez de la mañana. Todo ello en medio de una calma tensa. «A estas alturas no necesito explicar quién soy, pero sí quiero precisar algunas cosas que son importantes», ha comenzado a relatar.
Tras ello, la exmilitante del PSOE Leire Díez ha asegurado que los audios filtrados en los que se la escucha intentando hacer gestiones contra altos funcionarios públicos, eran parte de una investigación periodística que ha realizado durante varios años. «Es mi trabajo, no lo he llevado a cabo en nombre de nadie ni en representación de nadie», ha defendido desvinculando al PSOE de la polémica.
«Soy periodista y socialista», ha defendido. «Ser puede ser socialista y realizar un trabajo de investigación», ha continuado en una comparecencia en el sótano de un hotel céntrico de Madrid.
Aldama irrumpe por sorpresa desatando el caos
Durante poco más de ocho minutos, Díez ha estado dando explicaciones hasta que la calma tensa ha estallado por los aires. Justo cuando la exconcejal socialista pronunciaba «ni fontanera ni cobarde […] ni me van a intimidar», Víctor de Aldama, investigado en el caso Hidrocarburos y en el caso Koldo ha aparecido por un lateral de la sala. Tras esperar brevemente de pie, ha sorteado las cámaras que había en el lateral y se ha acercado a Díez provocando el caos en la sala en una situación inverosímil y difícilmente imaginable para cualquiera de los presentes.
Fuente: rtve.es