«La rápida reacción de los asistentes evitó una tragedia, pero el intento en sí mismo es gravísimo y debe ser rechazado por todos los que defendemos la paz y la concordia»
Como personas que anhelamos la paz y creemos firmemente en el diálogo y el respeto como pilares de nuestra convivencia, condenamos enérgicamente este acto de violencia contra la sede del PSOE en Cantabria. Lanzar artefactos inflamables contra un lugar donde se celebraba un acto democrático es un ataque directo a los valores fundamentales que nos permiten vivir en sociedad.
Este tipo de acciones, motivadas por el odio y la intolerancia, no tienen cabida en una sociedad democrática y plural como la nuestra. Afortunadamente, la rápida reacción de los asistentes evitó una tragedia, pero el intento en sí mismo es gravísimo y debe ser rechazado por todos los que defendemos la paz y la concordia.
Nuestra solidaridad con las personas que se encontraban en la sede y con todos aquellos que se sienten amenazados por este tipo de violencia. Confiamos en que se investigarán los hechos y se llevará ante la justicia a los responsables. Reafirmamos nuestro compromiso con la resolución pacífica de las diferencias y nuestra profunda convicción de que el camino hacia una sociedad mejor se construye a través del respeto mutuo y el entendimiento, nunca a través de la violencia y la intimidación.
Carlos Rangel es el presidente de la Unión de Profesionales Progresistas.